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Cómo preparar a tus hijos mayores para una sesión con su nuevo hermanito

Consejos para una experiencia bonita y sin estrés


Cuando llega un nuevo bebé a casa, la vida cambia… y no solo para los papás, también para los hermanos mayores. En una sesión de recién nacido, muchas familias quieren incluir a los peques mayores en las fotos, y es totalmente comprensible además de recomendable porque es un momento irrepetible para todos.


Pero claro, también es normal tener dudas:

“¿Y si no quiere participar?”“¿Y si se pone celoso o se cansa rápido?”“¿Cómo podemos hacer que todo fluya sin forzar?”

Hoy te cuento cómo preparo este tipo de sesiones y qué puedes hacer tú para que la experiencia sea bonita para toda la familia (y especialmente para los hermanos mayores).


Madre rubia abrazando y besando en la cabeza a su bebé recién nacido

1. Antes de la sesión, cuéntale lo que va a pasar

Los peques no necesitan saber cada detalle técnico, pero sí entender qué va a ocurrir ese día.

  • Explícale que vais a ir a ver a una persona que hace fotos bonitas.

  • Que estaréis juntos, y que podrá abrazar o tocar al bebé si quiere.

  • Y que no hay obligación de hacer nada que no le apetezca.


📌 Cuanto más claro y relajado lo presentes, más seguridad y curiosidad sentirá.


2. Valida sus emociones, sean las que sean

Tener un hermanito puede ser tan emocionante como desconcertante. Algunos niños están encantados, otros se sienten desplazados, y todo eso es normal. No pasa nada si el mayor no quiere participar todo el rato, o si está más inquieto de lo habitual. Lo importante es que sepa que también tiene un espacio en esta experiencia.


🤲 Yo siempre empiezo la sesión creando conexión con él o ella, antes incluso de hacer la primera foto.


3. El tiempo del hermano mayor es limitado

Los peques se cansan rápido, así que planificamos sus fotos al principio de la sesión. En muchos casos, solo están presentes 15–30 minutos. Después pueden quedarse jugando cerca, descansar o participar de nuevo si así lo desean.


🎯 Eso reduce el estrés y asegura que conseguimos fotos bonitas mientras aún están receptivos.


Bebé recién nacido dormido en los brazos de su madre

4. Trae algo para entretener y reconfortar

Un snack, un juguete favorito, su mantita o incluso una actividad tranquila como un cuento. Puede ayudarnos a que se sienta seguro, tenga algo propio en ese espacio nuevo y sepa que no todo gira en torno al bebé.


🌟 Consejo extra: si el objeto tiene valor emocional, puede formar parte de las fotos. ¡Quedan preciosas!


5. Haz que se sienta importante

Hazle partícipe:

  • “¿Me ayudas a elegir el gorrito del bebé?”

  • “¿Quieres enseñarme tu peluche favorito?”

  • “¿Te apetece hacer una foto con mamá y papá?”


🥰 La sesión se convierte en una experiencia en la que también es protagonista, y no solo en un “extra”. Por eso es tan importante informarle (en la medida de lo posible teniendo en cuenta su edad) de lo que vamos a hacer.


6. No insistas demasiado

Si en algún momento no quiere, se frustra o necesita espacio, está bien parar. Prefiero no forzar, no regañar y no convencerle a toda costa. A veces, después de una pausa o de observar en silencio, ellos mismos se acercan de forma natural.


📷 Y esas imágenes espontáneas son las que más os emocionan después.


7. Confía en que saldrá bien (aunque no sea como lo imaginabas)

No todas las fotos necesitan ser perfectas o posadas. Es más, a los más peques rara vez les hago posar. Una mirada de reojo, una manita tocando al bebé, una carcajada que nos pille de sorpresa… eso también cuenta la historia.


🌿 Mi trabajo es estar atenta a esos momentos reales, sin prisas y con mucha sensibilidad.


¿Te gustaría una sesión de fotos que integre a toda la familia?

Cada sesión es distinta, porque cada familia es única. Si estás esperando a tu segundo (o tercer, o cuarto) peque y te gustaría tener un recuerdo real, bonito y respetuoso, escríbeme. Diseñaremos juntas una experiencia que se adapte a vuestro ritmo y estilo, sin forzar nada.



 
 
 

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